En la eternidad existía
Dios, nada ni nadie le acompañaba, hasta el instante en que
El comenzó su obra de engendramiento en su amado Hijo
(Hebreos 1:, 2: convirtiéndose por primera vez en el
Padre eterno. El resto de sus hijos también fueron
engendrados. Dios Padre, comisionó a su amado Hijo para que
creara todo el Universo, así como a los ángeles. (Colosenses
1:16)
Nosotros los hijos de Dios, lo somos desde antes de la
creación de esta tierra. Los primeros que vinieron a
morar en cuerpos hechos del polvo de la tierra, fueron
nuestros primeros padres terrenales: Adam y Eva; ellos
existían en espíritus antes de la creación de nuestro
planeta .
En lo
que nosotros llamamos cielo, donde está el trono de Dios
ocupado por el Padre, el Hijo y los hijos recuperados
(Efesios 2:1-6) en esa área celeste han convivido los
ángeles como los mensajeros y asistentes en el Gobierno
Divino, claro no ocupando asiento en el trono pues ellos
fueron creados para servir a los herederos de salvación.
(Hebreos 1:14)
En
jerarquía estaba un querubín cubridor, hermoso y cuando
fue creado por el Hijo de Dios, lo vistió de piedras
preciosas y hubo música especial. Se cree que era el
dirigente entre los ángeles. La Escritura dice
en Isaías 14: y Ezequiel 28: que quiso ocupar
el trono y autotitularse semejante a Dios, todos los
ángeles incluyéndo al querubín escucharon del Padre
decir: “a cuál de los ángeles dijo Dios jamás: Mi Hijo
eres tú, hoy yo te he engendrado…adórenle todos los
ángeles de Dios…Tu trono oh Dios, por el siglo del
siglo.” Nadie creado en el mundo angelical ni podía ni
tenía derecho a ocupar la posición como Soberano sino
sólamente el Padre Espíritu.
En
Apocalipsis 12: Vemos como un ser arrastra a la tercera
parte de las estrellas. Isaías 9:15 …el profeta que
enseña mentira, este es cola. La serpiente con la cola
arrastra…mintiendo. El engaño produjo su efecto en un
treinta y tres por ciento de las estrellas Apc 1:20 dice
que estrella es igual a ángel.
El
profeta Zacarías profetizó lo siguiente en el capítulo
13:8,9 Y acontecerá en toda la tierra, dice Jehová, que
las dos partes serán taladas en ella, y se perderán;
mas la tercera quedará en ella. Y meteré en el fuego la
tercera parte, y los fundiré como se funde la plata, y
probarélos como se prueba el oro.
El
invocará mi nombre, y yo le oiré, y diré: Pueblo mío, y
él dirá: Jehová es mi Dios.
En el
cielo quedaron vacantes el treinta y tres por ciento de
las posiciones angelicales, estas vacantes serán
ocupadas por los hijos de Dios que vinimos por designio
divino a morar en la carne, en cuerpos procreados,
descendientes de Adam y Eva.
Esto
es el repoblar lo que quedó vacío. No es que seremos
ángeles en el cielo, seremos del Rey de Reyes, sus reyes
dispuestos a gobernar junto al Rey en todo el ámbito
sideral.
La
experiencia durante nuestra estancia en la tierra, no
fue por casualidad, vendríamos a cumplir con el
propósito del Padre, seríamos probados por fuego como se
prueba a la plata y al oro. Saldríamos con una
experiencia que hará que nunca más el pecado volverá a
levantar su horrible cabeza.
El
glorioso plan de salvación comenzó en el Padre, sabiendo
lo que acontecería con una rebelión de tal magnitud.
Engendró a su Amado y lo sentó junto a su Majestad.
Durante un tiempo comunicó el plan al Amado Hijo y a sus
hijos engendrados. Veníamos regularmente a la presencia
del Padre (Job 1: y 2:)
Jesucristo el Hijo Amado nos dice Juan 6:45,46 “Escrito
está en los profetas: Y serán todos enseñados de Dios.
Así que, todo aquel que oyó del Padre, y aprendió, viene
a mí. No que alguno haya visto al Padre, sino aquel que
vino de Dios, éste ha visto al Padre.
Nosotros los hijos de Dios aprendimos del Padre en su
presencia e incluso mirándonos de Espíritu a espíritu.
Antes de venir a morar en cuerpos terrestres, éramos
espíritus con la gloria del Padre.
En
Juan 4:23,24 Mas la hora viene, y ahora es, cuando los
verdaderos adoradores adorarán al Padre en espíritu y en
verdad; porque también el Padre tales adoradores busca
que le adoren. Dios es Espíritu y los que le adoran, en
espíritu y en verdad es necesario que adoren.
El
Padre es el Espíritu, nosotros le adorábamos en el cielo
en espíritu y verdad y siendo el Padre Espíritu y
nosotros igualmente como sus hijos engendrados, podíamos
verlo porque de El salimos.
Cuando
el Hijo Amado tomó cuerpo, nos anunció que había llegado
la hora de recuperar la gran experiencia sublime y bella
de adorar en espíritu al Padre Espíritu. Creo que esta
exposición no es fácil para algunos que viven en
creencias de de infierno, perdición, separación eterna,
obediencia a la ley para ser salvos, etc.
De
todas maneras como dijo Lucas: “Como otros han intentado
poner en orden la historia”, yo intento poner en orden
lo revelado por el Espíritu Santo. Lee, estudia, ora,
ora, ora y ora. No más miedo, manipulación, engaño ni
falsas doctrinas. Somos lo que somos, ahora sabemos de
donde procedemos y a donde volveremos. Gloria al
Altísimo Dios y Padre Espíritu de nosotros!
Con la
verdad de Dios, nosotros los hijos amados, debemos
asegurar nuestra posición bíblicamente. Para escribir
todo lo que la Santa Biblia dice acerca de la vida de
Jesucristo y su portentoso ministerio, no cabrían los
libros en el mundo (Juan 20:30,31) pero lo que expondré
a continuación será lo que necesitas para que nada ni
nadie te aparte de tu posición.
Comenzaremos identificándonos como hijos y a Jesucristo
como Hijo, ambos participando de lo mismo.
(Hebreos 2:14-17) Así que, por cuanto los
hijos participaron de carne y sangre, él también
participó de lo mismo, para destruir por la muerte al
que tenía el imperio de la muerte, es a saber, al
diablo. Y librar a los que por a la muerte estaban por
toda la vida sujetos a servidumbre,
Porque
ciertamente no tomó a los ángeles, sino a la simiente de
Abraham tomó. Por lo cual, debía ser semejante en todo a
los hermanos, para venir a ser misericordioso y fiel
Pontífice en lo que es para con Dios, para expiar los
pecados del pueblo. (Daniel 9:)
Los
hijos antes de habitar en cuerpos terrestres, éramos
conocidos de Dios (Romanos 8:29 “Porque a los que antes
conoció…”)
Los
hijos participamos de carne y sangre, descendientes de
Adam y Eva en procreación, de acuerdo con el plan
Divino. En el cielo fuimos enseñados del Padre Espíritu
de este plan en el cual estaba dado el conocimiento de
la futura destitución de la gloria celestial por el
pecado de nuestros primeros padres y que esto sería una
prueba de las consecuencias de la desobediencia de
Adam.
En el
predecreto Divino se enseñó que el Hijo Amado moriría
para salvar lo que se había perdido. (Lucas
19:10, Apocalipsis 13:8, Efesios 1:4 también se nos
recuerda en 2 Timoteo 1:9 Que nos salvó y llamó con
vocación santa, no conforme a nuestras obras, mas según
el intento suyo y gracia, la cual nos es dada en Cristo
Jesús antes de los tiempos de los siglos.
El
Hijo Amado, nuestro hermano mayor (Rom. 8:29 y Juan
20:17) vino por el amor del Padre Espíritu (Juan 3:16 y
Romanos 5:5,8) vino a salvarnos y a buscarnos y cuando
cumplió a cabalidad con el gran plan de salvación, se
convirtió en el primogénito entre muchos hermanos. (Rom.
8:29) 1 Juan 3:1,2 “Mirad cuál amor nos ha dado el
Padre, que seamos llamados hijos de Dios: por esto el
mundo no nos conoce, porque no le conoce a él…”
Siempre como dijo Juan del mundo que no conoce a Dios,
nos dice: Yo no ví a Dios en el cielo tampoco me vi yo
allá y sin embargo, muchos dicen que creen en Jesucristo
aunque no vivían en los años del ministerio del Señor,
ni anduvieron con El. Si no tienen el Espíritu de
Cristo, no son de él ni tampoco de su fe. (Romanos 8:9)
Se hace imposible para los que no son de los
predestinados para recuperar la imagen perdida que
teníamos de nuestro hermano Mayor Jesucristo, se hace
imposible entender, ver, creer, ser lo que no son ni
nunca serán, no son de los de la tercera parte que
fuimos engendrados en el cielo para repoblar el espacio
vacío.
La
redención efectuada por el Amado Hijo de Dios Padre
“Todo
aquel que fue enseñado por el Padre, viene a mi”
El
Padre nos enseñó en el cielo lo concerniente al Plan de
Salvación, en el cual estaba incluida, la muerte vicaria
de Jesucristo su Hijo.
Por
Adam, fuimos vendidos a sujeción de pecado (Rom. 7:14)
Jesucristo nos libró de esa ley de pecado y de muerte
Rom. 8:2,3 La vida del Cordero de Dios nos libró y nos
salvó de la ira, el pecado y la muerte eterna. Isaías
53:6-12, Juan 1:29, Daniel 9: expió el pecado…
Participamos de carne y sangre y también el Hijo Amado,
para librarnos del miedo a la muerte y su servidumbre
para siempre. Hebreos 2:14-17
Jesucristo nos libró y Dios Padre nos adoptó, pues por
causa de Adam, fuimos destituidos de la gloria de Dios
Romanos 3:23
La
adopción se efectúa una sola vez. En la adopción el
adoptador recibe al adoptado sin condiciones previas,
sin requisitos a cumplir y sin la posibilidad de que se
pierda la adopción, pues es permanente y para siempre.
Nos
escribió Pablo en Romanos 8:14-17 Porque todos los que
son guiados por el Espíritu de Dios, los tales son hijos
de Dios. Porque no habéis recibido el espíritu de
servidumbre para estar otra vez en temor; mas habéis
recibido el espíritu de adopción, por el cual clamamos,
Abba, Padre. Porque el mismo Espíritu da testimonio a
nuestro Espíritu que somos hijos de Dios. Y si hijos,
también herederos, herederos de Dios, y coherederos de
Cristo…padeciendo con Cristo para la glorificación
final.
Al ser
librados del temor a la muerte, se incluye la
destrucción del poder de aquel que tenía el imperio de
la muerte. Como hijos adoptados por Dios, El mismo nos
dice que somos sus hijos con todo el beneficio de su
grandiosa herencia. Participamos de la herencia de
ambos: Del Padre Espíritu y de su Amado Hijo Jesucristo.
La
circuncisión es una sola vez, pues solo existe un
prepucio, por ello no habrá una nueva circuncisión del
corazón de piedra pues para el hijo de Dios, éste ya no
existe ni existirá jamás. Rom. 2:28-
Existió un solo sacrificio del Cordero inmaculado.
Porque
con una sola ofrenda hizo perfectos para siempre a los
santificados. (Hebreos 10:14)
El
Hijo de Dios, no volverá al Calvario. Una sola
circuncisión, una sola adopción, un solo sacrificio, una
sola muerte, una sola resurrección espiritual y una sola
glorificación espiritual.
Porque
es imposible que los que una vez fueron iluminados y
gustaron el don celestial, y fueron hechos participes
del Espíritu Santo, y asimismo gustaron la buena palabra
de Dios, y las virtudes del siglo venidero, y recayeron,
sean otra vez renovados para arrepentimiento,
crucificando de nuevo para sí mismos al Hijo de Dios, y
exponiéndole a vituperio.
El
hijo de Dios que caiga, es en la carne que posee, y en
ella existe una ley de pecado y muerte hasta el fin.
Romanos 7: y 8:10 “La carne está muerta por causa del
pecado, pero el espíritu vive por causa de la
justicia. 2 Cor. 5:21 “Al que no conoció pecado,
hizo pecado por nosotros, para que nosotros fuésemos
hechos justicia de Dios en él. Gloria al Alto Dios!
Romanos 8:1-10 …Porque la ley del Espíritu de vida en
Cristo Jesús me ha librado de la ley del peado y de la
muerte. Porque lo que era imposible a la ley, por cuanto
era débil por la carne, Dios enviando a su Hijo en
semejanza de carne de pecado, y a causa del pecado,
condenó al pecado en la carne.
Es
imposible a la carne obedecer a la ley, la carne está
muerta por causa del pecado y los que quieran estar en
la carne muerta viviendo en ella sin esperanza y sin
justicia, no pueden agradar a Dios. El que recaiga
recibe disciplina, corrección o azote de parte del Padre
Espíritu Hebreos 12:4-11 (El Padre de los espíritus
dirige personalmente el castigo al hijo que ama y lo
hace en la carne. 1 Cor. 11:29-32. 5:1-5 …por el pecado
sería muerto en la carne, pero su espíritu sería salvo
en el día del Señor Jesús. Cap. 3:15 …será salvo como
por fuego. (Por lo cual hay muchos enfermos y
debilitados entre vosotros; y muchos duermen.
Ya por
un solo sacrificio nos hizo perfectos para siempre, Dios
nos recuperó por medio del precio pagado por su Amado
Hijo. Somos de los espíritus de los justos hechos
perfectos. Hebreos 12:22-24
Entonces concluimos que el que recae en la carne no
puede volver a arrepentirse pues es un don de Dios que
se recibe también una vez, si así fuere tendría
Jesucristo que morir en una cruz o cualquier otro
instrumento de muerte. Hechos 5:31, 2 Tim. 2:25 El
arrepentimiento es un don como lo es la fe y muchos más
y los dones son irrevocables Romanos 11:29
La
resurrección espiritual es una y para siempre y en ella
se vive reinando con abundancia de gracia y don de
justicia Romanos 5:17
Efesios 1:16-23 Pablo ora…el poder que resucitó a
Jesucristo…
2:1-6
…de la potencia de la Fortaleza de Dios recibimos,
estando muertos en delitos y pecados…5 Aun estando
nosotros muertos en pecados, nos dio vida juntamente con
Cristo; por gracia sois salvos; y juntamente nos
resucitó, y asimismo nos hizo sentar en los cielos con
Cristo Jesús.
Esta
resurrección espiritual es una y para siempre, ahora
nuestro espíritu de adopción está en reposo, sentado en
el trono al lado de Jesucristo y Jesucristo al lado de
la Majestad. Gloria! Nunca más bajaremos de la posición
en la que estamos, pues es eterna y perenne. Bendito
Dios!
En la
cruz murió Jesucristo con el cuerpo contaminado por el
pecado, de la misma manera nuestro cuerpo fue
considerado para morir en la misma cruz Gálatas 2:20, 2
Cor. 5:14-17 Cuando Jesucristo murió también nosotros,
ya a Jesús no lo conocemos en la carne de igual manera a
los demás. Si estamos en Cristo nuevas criaturas somos,
las cosas Viejas pasaron he aquí todas son hechas
nuevas. Esto es de Dios.
La
nueva criatura es el espíritu adoptado, el hombre
interior, el hijo recuperado y glorificado para siempre.
Nadie puede ni podrá destruir la obra hecha del Padre
Espíritu. Para mi, esto si es buena noticia de gran
gozo. Mi carne caída no puede destruir la obra de Dios.
Es totalmente seguro y nos trae paz y reposo, el creer
que lo que Jesucristo salvó no vuelve a estar en
posición caída, separada y bajo maldición.
Sigue
diciendo el Apóstol Pablo en Colosenses 1:9-23 Por lo
cual también nosotros, desde el día que lo oímos, no
cesamos de orar por vosotros, y de pedir que seáis
llenos del conocimiento de su voluntad, en toda
sabiduría y espiritual inteligencia. Para que andéis
como es digno del Señor, agradándole en todo
fructificando en toda buena obra, y creciendo en el
conocimiento de Dios: Corroborados de toda Fortaleza,
conforme a la potencia de su gloria, para toda
tolerancia y largura de ánimo con gozo. Dando gracias al
Padre que nos hizo aptos para participar de la suerte de
los santos en luz: Que nos ha librado de la potestad de
las tinieblas, y trasladado al reino de su amado Hijo.
En el cual tenemos redención por su sangre, la remisión
de pecados.
Jesucristo, tiene todo el primado: primogénito de toda
criatura, de los muertos y de los resucitados, es el
creador de todo y la Cabeza de la Iglesia. El Padre nos
hizo aptos y ahora ya trasladados al reino de su amado
Hijo, vivimos por él y para él por toda la eternidad.
Del Reino no salimos, en él vivimos y reinaremos con el
Rey de reyes en el infinito eterno por siempre jamás.
Pablo
oraba para que fueran llenos del conocimiento de la
voluntad de Dios. Yo hago lo mismo.
La
buena voluntad de Dios.
Romanos 12:1-3 …reformaos por la renovación de vuestro
entendimiento, para que experimentéis cual sea la buena
voluntad de Dios, agradable y perfecta.
Efesios 1:5 Habiéndonos predestinado para ser adoptados
hijos por Jesucristo a sí mismo, según el puro afecto de
su voluntad. Para alabanza de la gloria de su gracia,
con la cual nos hizo aceptos en el Amado: En el cual
tenemos redención por su sangre, la remisión de pecados
por las riquezas de su gracia que sobreabundó en
nosotros en toda sabiduría e inteligencia;
descubriéndonos el misterio de su voluntad, según su
beneplácito, que se había propuesto en sí mismo, de
reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del
cumplimiento de los tiempos, así las que están en los
cielos, como las que están en la tierra: En él digo, en
quien asimismo tuvimos suerte, habiendo sido
predestinados conforme al propósito del que hace todas
las cosas según el consejo de su voluntad.
Su
voluntad fue predestinarnos para ser adoptados como
hijos por el Espíritu santo y ser conforme a la imagen
de su Hijo y ser El el mayor entre los hermanos Rom.
8:29
Adam
desfiguró la imagen de Dios que estaba en él y nos
trasmitió la destitución de la gloria de Dios. Solamente
fuimos destituidos una vez de la gloria de Dios y
solamente la recuperamos una vez.
Jesucristo es el postrer Adam, no hay un segundo Adam,
pues habría la posibilidad de un tercero, Pablo lo
recalca diciendo postrer, ultimo, no otro, el fundamento
está puesto y es Jesucristo 1 Cor. 3:11 Gloria a Dios
Romanos 5:14 Adam figura del que había de venir. El
primer Adam vehículo de la separación, el postrer Adam
el de la reconciliación 2 Cor. 5:19 la reconciliación en
Cristo, no nos imputó los pecados “Pasando por alto los
pecados pasados. Romanos 3:25
Perdonándonos todos los pecados: pasados, presentes y
futuros Colosenses 2:13 Estando muertos en pecados nos
vivificó juntamente con él perdonándonos todos los
pecados. Fuimos resucitados con el mismo poder que
resucitó a Jesucristo, esta es la vivificación que
menciona Pablo, al sentarnos con Jesucristo en su trono,
solamente es posible si fueron perdonados todos los
pecados que proceden de la carne, pues esta estaba
muerta por los delitos y pecados. Aunque la carne
mantenga la ley de muerte y pecado, el espíritu adoptado
no pues esta es la simiente de Dios y no peca ni puede
pecar 1 Juan 3:4-12
Jesucristo deshizo las obras del Diablo. Ya no nos puede
acusar. Romanos 8:33 Quién acusará a los escogidos de
Dios? Dios es el que justifica. En el juicio fuimos
justificados, la sangre de Cristo nos redimió y en su
resurrección fuimos fuimos justificados Romanos 4:25
El
juicio vino por un pecado (el de Adam) Rom. 5:16
Juzgaron a Jesús en el tribunal de Pilato y condenado a
muerte y en el Getsemaní, Jesucristo accedió a beber la
copa llena con nuestras transgresiones, la copa del
Señor limpia, pura, santa, inocente, apartada de los
pecadores y hecha más sublime que los cielos, fue llena
con nuestras suciedades, impurezas, impiedades y pecados
Hebreos 7:26
Jesucristo pagó por el pecado y esto con muerte y muerte
de cruz. Una sola vez, un solo juicio, no más juicio, no
más acusador, no más sacrificio. Gloria a Dios!
No
temas hermano o hermana, no se turbe vuestro corazón ni
tenga miedo. Dios nos ha dado espíritu de poder, amor y
dominio propio. Si por el pecado de Adam vamos a ser
juzgados no se salva nadie, el plan de Dios fracasó y el
sacrificio de Jesucristo es en vano Gálatas 2:21
Una
sola adopción, una sola resurrección espiritual, una
sola nueva criatura, un solo hombre interior, una sola
circuncisión, un solo Dios, un solo Señor, un solo
Padre, un solo Espíritu, un solo bautismo.
“Un
cuerpo, y un Espíritu; como sois también llamados a una
misma esperanza de vuestra vocación: Un Señor, una fe,
un bautismo, un Dios y Padre de todos, el cual es sobre
todas las cosas, y por todas las cosas, y en todos
vosotros.”
Se han
dado cuenta mientras han leído el misterio oculto,
profundo y que solo por revelación podemos compaginar y
eslabonar correctamente, la unidad de Dios con su Amada
Iglesia que es su cuerpo?
El
bautismo, (que significa=sumergir) es uno solo como todo
lo anterior=uno solo.
Juan
bautista en los días de su ministerio, bautizaba en el
río y los primitivos dirigentes Judíos, lo continuaron
haciendo de la forma que lo efectuaba Juan, por
inmersión.
Pablo
el Apóstol del nuevo pacto, llamado, consagrado y
ordenado por el Espíritu Santo y reconocido por la
iglesia, pues les impusieron las manos y lo enviaron.
Hechos 13:1-3 Pablo escribiendo a los Corintios les dice
1:14-17 “Porque no me envió Cristo a bautizar, sino a
predicar el evangelio…
Juan
el bautista al ver a Jesús allí en el lugar del Río
Jordán, dijo en Juan 1:26 Yo bautizo con agua; mas en
medio de vosotros ha estado…33 el que me envió a
bautizar con agua, aquel me dijo: Sobre quien vieres
descender el Espíritu, y que reposa sobre él, éste es el
que bautiza con Espíritu Santo. Y yo le vi, y he dado
testimonio que éste es el Hijo de Dios. Lucas 3:16 “Yo a
la verdad, os bautizo en agua; mas viene quien es más
poderoso que yo, de quien no soy digno de desatar la
correa de sus zapatos: él los bautizará en Espíritu
Santo y fuego…y juntará el trigo en su alfolí…
Hechos
1:5 Porque Juan a la verdad bautizo con agua, mas
vosotros seréis bautizados con el Espíritu Santo no
muchos días después de estos. Hechos 2:1-4 Espíritu
Santo y fuego…
El
bautismo al cual se refiere Pablo en Efesios 4: no es el
bautismo por agua sino la del Espíritu Santo, en el
nuevo pacto hay solo un bautismo no dos.
En
Hebreos 9:14 El Espíritu eterno ofreció la sangre de
Cristo. Recuerden que El Espíritu Santo engendró a Jesús
en María, lo llevó al desierto para ser tentado, lo
llevó a la cruz, lo resucitó y lo llevó a las mansions
celestiales.
El
bautismo de muerte que sufrió Jesús, también se nos
adjudicó. Romanos 6:3-11 …somos bautizados en su
muerte…sepultados juntamente con él a muerte por el
bautismo; para que como Cristo resucitó de los muertos
por la gloria del Padre, así también nosotros andemos en
novedad de vida…sabiendo esto, que nuestro viejo hombre
juntamente fue crucificado con él, para que el cuerpo
del pecado sea deshecho, a fin de que no sirvamos más al
pecado. 2 Cor. 5:14-17 Cristo murió por todos, luego
todos son muertos…
Ya no
más símbolos, pan, jugo de uva, circuncisión, bautismos…
Hebreos 6:1-6 …dejar: doctrina de bautismos,…
Jesucristo nos circuncidó el corazón, El es nuestra
Pascua ya sacrificada por nosotros, El nos bautizó con
el Espíritu Santo, entonces: no más pan y jugo, no más
circuncisión del prepucio para pertenecer al pueblo
escogido y no más agua porque de lo contrario volvemos
al bautismo de Juan. Colosenses 2:11-13 Estamos
circuncidados no hecha con mano porque a Cristo le
cortaron el prepucio y nuestro cuerpo de pecado fue
echado, si a El lo sepultaron físicamente a nosotros nos
pusieron en el mismo lugar con El y cuando resucitó,
igualmente nosotros Efesios 1:16-22, 2:1-6 Al perdonando
Dios todos los pecados. No hay necesidad de practicar
símbolos. Todo está consumado. Gloria a Dios.
Vivir
en reposo, paz, gozo, seguridad, certeza, confianza,
proclamando las buenas nuevas de lo que el Padre hizo
para nosotros en su Amado Hijo Jesucristo.
Dijo
Pablo: Todo lo podemos en Cristo que nos fortalece
Todo
lo sabemos, todo es nuestro, nadie nos podrá apartar del
amor de Dios que es en Cristo Señor nuestro.
Que
vivamos o muramos, del Señor somos
El
morir en Cristo es ganancia
El que
está bautizado en su nombre de El está vestido
Tenemos el Espíritu de Cristo
NUESTRO PRINCIPIO PROTESTANTE ES: SOLO CRISTO, SOLA
ESCRITURA, SOLA GRACIA Y SOLA FE